miércoles, 25 de noviembre de 2020

El día que murió el futbol en persona

 

Por: Aldo Clark

@aldocorp

Este 25 de noviembre el mundo se conmocionó con la partida de una leyenda del futbol, el argentino Diego Armando Maradona, considerado por muchos como el mejor jugador de la historia, pues hizo méritos para ganarse ese título y también su mote: D10S.

De entre sus pocos apodos, el de D10S le quedó como anillo al dedo, pues como deidad del balompié, demostró que el futbol estaba hecho a su imagen y semejanza, tanto en forma positiva como negativa; en lo primero, con la magia, espontaneidad, el espectáculo y al siempre marcar tendencia; en lo segundo, al ser corruptible, iracundo y adicto (a sustancias, fiestas y otros males propios, no solo del futbolista y su afición, sino de la humanidad).

Mucho de lo positivo lo hizo dentro de la cancha, pero hasta fuera de ella deslumbró, al pelear por los derechos de los futbolistas y participar en campañas con causa; mientras que la mayor parte de lo negativo lo hizo fuera del terreno de juego, con sus arrebatos que se hicieron cada vez más públicos, al grado de quedar expuesto ante todo el mundo.

En carne y hueso, Maradona dio muestras de auténticos milagros de la cancha; después de la muerte, su nombre seguirá sonando por generaciones, con huellas impresas y digitales de sus hazañas. Además es omnipresente, hablan y hablarán de él en Nápoles, Barcelona, Buenos Aires, la Ciudad de México y más lugares.

Al respecto, no solo las estadísticas demuestran su estatus de leyenda, pues contó con varias generaciones de testigos oculares de su potencial. Muchos lo vieron jugar en su apogeo y otros lo miraron aunque sea en partidos de beneficencia, donde, pese a su escasa movilidad, era capaz de hacer jugadas increíbles.

Maradona experimentó todas las emociones del ser humano; al igual que Siddharta, probó los placeres más mundanos, pero también la satisfacción personal y la consagración espiritual, la cual alcanzó en un país donde el juego de la pelota es venerado desde la antigüedad. Diego alzó la Copa del Mundo a escasos kilómetros de Teotihuacán, donde los hombres se hacen dioses.


Foto: FIFA

viernes, 20 de noviembre de 2020

¡Tremendo! Uub ayuda a Gokú para vencer a Moro

 Por: Redacción

@enreproduccion

El capítulo 66 del manga de Dragon Ball Super ya se estrenó y aparentemente llegó el desenlace de la lucha entre Gokú y Moro, donde hubo muchas sorpresas, pues Kakarotto recibió la ayuda de todos sus amigos, incluso algunos totalmente inesperados.

Moro había absorbido a la Tierra y era una bomba de tiempo, pues crecía desproporcionadamente, al grado de poner en peligro a la galaxia entera con una inminente explosión, por lo tanto, Bills decidió ayudar a Gokú; sin embargo, recibió una llamada de último momento de parte del Sumo Sacerdote, por lo que debía retirarse de inmediato para acudir a territorio de Zen O Sama.

Antes de irse, Wiss se acercó a Gokú y le dio la clave para derrotar a Moro: un golpe certero en la gema de su frente; así que el saiyajin se puso en marcha, pero con mucha dificultad, pues el villano absorbía cada vez más energía, además de ponerle obstáculos.

En ese momento apareció Vegeta para ayudar a Gokú, limitando el poder de Moro con la técnica que había aprendido, pero ni así Kakarotto pudo llegar al lugar donde debía dar el golpe, pues fue atrapado por su enemigo.

Entonces Gohan, Píccoro, Tenshinhan, Chaoz, Krillin y Vegeta brindaron sus energías a Gokú, pero no fueron suficientes para hacer que su amigo se librara del villano y acabara con él, debido a que necesitaba alcanzar un poder divino.  

Todo parecía perdido, pero el Sagrado Supremo Kaiosama, aún en el cuerpo de Majin Buu, acudió con el pequeño Uub y le ayudó a enviar su Ki a Gokú. Todos se sorprendieron al ver la cantidad de energía que llegaba al lugar de la batalla; Vegeta la controló rápidamente y se la dio a Kakarotto, quien en el acto se hizo gigante con el Ultra Instinto y dio el golpe final para hacer explotar a Moro.

Uub fue de gran ayuda debido a que el poder divino del Sagrado Supremo Kaiosama no residía en el Majin Buu bueno sino en el malo, cuya reencarnación era el pequeño terrícola. Esto último podría ser el golpe final de Akira Toriyama para borrar de forma definitiva los acontecimientos de Dragon Ball GT. Tal vez ello se confirme en el próximo capítulo del manga de Dragon Ball Super que será publicado el 20 de diciembre, por lo que será el último número del año.

 


 

lunes, 9 de noviembre de 2020

¡Fiera indomable! León entra al top de clasificados con más puntos

 

Por: Redacción

@enreproduccion

León, bajo la batuta de Ignacio Ambriz, ha tenido un rendimiento bastante alto, pues en los dos años con Nacho ha clasificado a tres Liguillas; además, en dos de ellas consiguió o superó los 40 puntos, algo que pocos lograron en Torneos Cortos.

León alcanzó los 40 puntos en este Guardianes 2020 y previamente en el Clausura 2019 hizo 41, cifra que ningún equipo obtenía desde 2004. Pumas consiguió dicha puntuación en el torneo de Clausura, lo curioso es que no fue líder general, ya que ese puesto fue de los Jaguares de Chiapas que hicieron 42.

La mayor cantidad de puntos en un Torneo Corto la consiguió América en el Apertura 2002 con 43 unidades; en dicho certamen, el sublíder no se quedó muy atrás, pues el Toluca hizo 42. Pero los Diablos no solo llegaron a la barrera de los 40 puntos en el 2002; ya habían alcanzado esa cifra en el Verano 2000.

Por su parte, el primer club que llegó a los 40 puntos en un Torneo Corto fue el Cruz Azul, en el Invierno 1998. Cabe destacar que solo dos de los equipos que han pasado la barrera de las cuatro decenas de unidades han podido ser campeones: Pumas y Toluca, pero ambos quedaron en segundo lugar de la tabla general en los respectivos torneos donde se coronaron.

 


Mientras tanto, en el otro extremo de los clasificados, Puebla ingresó al repechaje del Guardianes 2020 con apenas 20 puntos, una de las cifras más bajas en la historia de invitados a la Liguilla; sin embargo, no es la peor.

Los Tecos clasificaron a la Fiesta Grande con apenas 20 puntos en el Verano 1997; Rayados, con una unidad menos, entró al repechaje del primer Torneo Corto: el Invierno 1996. Por su parte, la peor cifra registrada en Liguilla, también gracias a una repesca, fue de 18 unidades que consiguió precisamente Puebla en el Verano 1998. Ninguno de ellos fue campeón.