Por: Diana Solís
@Diana66782190
Al coro de “putos los de abajo”, “chinga tu
madre” y el ya famoso “¡¡eh!! Puto” el Auditorio Nacional se llenó de energía
con la presentación de Molotov el pasado 4 de junio, celebrando 18 años de
carrera artística.
Con un repertorio de más de 15 canciones, los
músicos de Molotov cimbraron a las más de diez mil personas que adquirieron uno
de los boletos para el concierto, el cual obtuvieron en la compra del disco más
reciente de la agrupación: Agua maldita.
Desde muy temprano, los admiradores de la
banda llegaron al recinto para apartar un buen lugar, ya que el boleto era de
acceso general así que cabía la oportunidad de obtener la mejor vista para
deleitarse los oídos con estos grandes músicos mexicanos.
Fue alrededor de las 6:00 de la tarde que la
lluvia cobijó a la ciudad y no fue razón suficiente para no llegar al concierto
en carro, caminando, corriendo, en metro, metrobús o cualquier otro medio de
transporte colectivo.
Las puertas de acceso fueron abiertas a las
7:30 de la noche, y, como armas disparadas, los jóvenes de entre 15 y 30 años
corrieron en busca de un asiento muy cerca de su artista; no era de esperarse
que hubiera conmoción en los fans, cuando éstos lograron percatarse de que la
primera sección del Auditorio estaba destinada a otro público, lo que ocasionó
grandes olas de furia a la voz de “ putos los de abajo”, “el boleto es
general”, “ellos compraron 100 discos o qué”, y demás expresiones de
inconformidad.
Y es que no era para menos que los fans de
Molotov desearan escuchar a todo pulmón los clásicos como: voto latino, gimme
the power, rastamandita, chinga tu madre, puto, here we come, dance a dense
denso, frijolero, amateur, matate tete, parasito, vale chol, perro negro,
marciano, sanwish a la chichona, molotov y por supuesto, el nuevo disco con la
participación de DMC banda de rap americana.
Iniciando a las 9:43 de la noche y terminando
20 minutos antes de la media noche, el público disfrutó de un espectáculo
fenomenal teniendo la oportunidad de ver las adaptaciones y cambios entre los
mismos integrantes de la banda con los instrumentos y la voz, lo que dio un
ritmo importante y divertido al evento, sin olvidar que Molotov tiene más años
y más generaciones a las que enseñará que el “pueblo unido jamás será vencido”
y a quien no le parezca que “’ ¡CHINGUE A SU MADRE!”
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